La vida.

Ese momento en el que sientes que algo se quiebra dentro de ti, como un lazo que se rompe en dos trozos exactamente iguales; uno, es todo lo pasado y las personas que te acompañaron; y el otro, es el que camino que aún tienes que recorrer y las personas que te quedan por conocer.

Y ahí es cuando te das cuenta que nada volverá a ser igual, que nada es permanente ni nada es para siempre. Ni el tiempo, ni las circunstancias, ni las situaciones, ni las personas, ni siquiera tú.

Porque el tiempo que te ha tocado vivir ahora sólo lo vas a vivir una vez. Recuerda: sólo una.

Cada vivencia, cada cambio es una explosión que te transforma para siempre. Por ello debemos permanecer en alerta constante, para no dejar escapar ni un instante, ni una oportunidad.

Vuela, como la vida.

Changes.

Nueve de Julio del 2013. Ha pasado mucho tiempo desde que no escribo, y han cambiado muchas cosas desde entonces.
Acabo de terminar mi primer año de carrera. Al final me decidí por hacer ADE+ Derecho, y la verdad no fue tan malo como me imaginaba en un principio. Fue una decisión difícil, pero dicen que las cosas suceden por algo ¿no?
Bueno, qué contar de mi experiencia universitaria... simplemente ha sido genial. Tal y como me imaginaba que sería la universidad. Sobre todo me refiero a la gente. He hecho buenos amigos allí, y se que este verano voy a echar mucho de menos a algunos de ellos que no podré ver.
Quedó atrás la tristeza, los bajones, los días grises. Está claro que mi vida no ha sido perfecta desde aquel entonces, ni muchísimo menos. Pero ahora veo las cosas diferentes, afronto los problemas de otra manera, soy más optimista y más fuerte. No tengo miedo de estar sola frente a la vida, ni resolver mis problemas. He decidido que es mejor coger al toro por los cuernos y dejar de refugiarme en papá y mamá. He decidido ser yo la que tome mis propias decisiones y ser yo mi propia solución. En fin, he crecido, he madurado, el tiempo ha pasado... 
Y todavía me queda mucho por descubrir, tanto malo como bueno, pero ya no tengo miedo. Que venga lo que tenga que venir, bienvenido será. Porque todos y cada uno de mis fallos me han traído hasta aquí, hasta la persona que soy hoy y puedo decir que estoy orgullosa de serlo. 
Cada suceso de la vida te cambia, cada persona, cada desgracia, cada alegría, cada carcajada, cada viaje... 
te llevan hacia el camino correcto, el camino de tu vida.
Y veo una foto de cuando era pequeña, y me paro a pensar en todo el tiempo que ha pasado, en todo lo que aprendido, lo que he sufrido, lo que reído, lo que he vivido. Es bestial como puede cambiar una persona en un espacio relativamente corto de tiempo. De los 12 a los 14. De los 16 a los 18. Y así sucesivamente... Sí, somos nosotros, nosotros mismos, en nuestro interior tenemos los mismo sueños e ilusiones, pero más ganas de vivir que nunca. Pero también nos hemos transformado, hemos evolucionado, hemos crecido;.. hemos cambiado.  
Ya no soy tan ingenua ni tan insegura como antes. Ya no permito que nadie que me pise. Ya no me siento inferior, porque todos somos iguales, y todos somos personas. Ya no me callo cuando tengo que responder. Ya no tengo miedo a lo que piensen los demás porque cuando hago algo, lo hago convencida y con todas las consecuencias, y no necesito nadie a la espalda que me esté apoyando para hacerlo. Soy consecuente con mis actos y palabras, y cuando me equivoco lo reconozco. Pero sin llantos. 
Me siento más libre que nunca. Me siento segura de mí misma y con toda la fuerza que necesito para mirar hacia delante y no desperdiciar ni un solo segundo en volver la cabeza, en pensar en personas, problemas, o sufrimiento del pasado. Todo eso quedo atrás, con todas esas personas.
 Ahora he vuelto a creer, en la amistad, en los sueños, en que el mundo puede cambiar con pequeños actos. Y creo que la vida me está recompensando por todo lo malo pasado, poco a poco, como dice la canción de fito," ahora el viento viene de otro lado". Y ante todo me siento una afortunada de poder estar hoy aquí escribiendo esto. Y sobre todo, porque todavía me queda mucho, muchísimo.

Ahora soy feliz, y no porque precisamente no tenga problemas. Los tengo y muchos, pero a pesar de ello lo soy. Intento levantarme cada día con una sonrisa, ser positiva, no agobiarme en exceso, disfrutar cada segundo del presente porque lo demás es incierto, intento hacer reír a la gente que me quiere, y estar ahí cuando me necesiten...
Intento ser mejor persona. 

Quiero agradecer a cada persona que ha entrado en mi vida este año, sobre todo a ellas, porque son increíbles. Verdaderamente me he sentido querida y apoyada, y sé que es recíproco. Por primera vez he sentido que encajo con alguien, que puedo ser yo misma, que si tengo algún problema ellas van a estar ahí. Porque poco a poco me lo han demostrando y espero que sea así para siempre, y por supuesto yo para ellas. 

Porque la amistad, como bien dijo un poeta cuyo nombre no recuerdo, es un mismo espíritu repartido en varias personas. A veces la puedes encontrar en quien menos esperas. Y yo he tenido mucha suerte de encontrarla en ellas. 

Learning

Nadie merece tanto, como para que des todo por alguien..

Make you feel my love

Creo que me estoy volviendo algo loca. A veces tengo momentos de euforia, de felicidad extrema, momentos en los que me pongo a cantar y a bailar encima de mi cama como una loca. Momentos en los que recreo mi mundo interior y yo soy lo único que importa. Momentos en los que siento que soy más fuerte que todo esto, que nada puede conmigo, que jamás nada ni nadie me podrá parar.
 A veces creo en lo bonito, en los amores de pelicula, en la fe, en las buenas intenciones, en la amistad, en la humanidad. Creo en que lo nuestro es infinito y que el destino se las arreglará para que un día volvamos a estar cara a cara, mirandonos a los ojos, abrazandonos el alma.
 El problema es que esto último, no sólo lo creo a veces. Es rara la noche que no me paro a pensar, con la música inundando mi mente y la suave brisa de verano entrando por la ventana, en cómo sería ese momento. Es más, espero que pase para verle algún sentido a todo a esto que siento. Se ha convertido en un motivo importante en mi vida, es algo que me mantiene viva, con ilusión, con ganas, con esa chispa especial que todas las personas necesitan. Y eso solo me lo has sabido dar tú.
Por eso creo que me estoy volviendo algo loca, porque ha pasado mucho tiempo,muchísimas cosas que no se podrán borrar y que ambos a lo mejor no podemos perdonar. Pese a ello, lo pongo todo en una balanza, y para mí, siempre saldrán ganando los buenos momentos junto a ti. Aunque sean más escasos, y mucho más lejanos, están grabados a fuego en mi corazón. Cargados de millones de detalles especiales, de pasión, de risas, de besos, de sentimientos.
Cargados de amor.
Sí, estoy loca. Porque no puedo olvidarte, no puedo, es algo que intentado por todos los medios, y a día de hoy todavía mi vida se consume con tu recuerdo. Por pensar que todo esto no tiene fin y que mi futuro está a tu lado. Y sólo en esos momentos me doy cuenta de que... estoy profundamente enamorada de ti. No hace falta que digas nada, solo quería decirte que en esos arranques de locura,pienso en esa noche con el cielo azul intenso, tu mano entrelazada con la mía, mientras las estrellas alumbraban nuestro camino.... e inevitablemente, una sonrisa aflora en mi cara.

Es todo muy... extraño

No se exactamente lo que siento. Ahora mismo mi alma esta dividida en dos: una parte no sabe que siente, y la otra tiene un brillo azul radiante.
Bueno, para ser más directos he estado unos dias bastante pensativa, porque he sentido cosas que no me han gustado para nada. ¿Os habeis sentido alguna vez reemplazados? Yo sí.
Y me duele viniendo de la persona que viene, porque yo se que esa persona siempre ocupará un lugar especial en mi corazón, pero no puedo afirmar lo recíproco. No se trata de que haya hecho mal o bien actúando de esa forma que a mí me ha dolido, no se trata de perdir perdón. Solo que poco a poco me doy cuenta que tenemos ciertas circunstancias, y que esa persona tiene su vida independientemente de mí. Que soy algo ajeno a todo eso, a todo lo que le rodea y que está viviendo día a día. A veces contarse la vida por teléfono no basta, y aunque me duela darme cuenta de esto, muchas cosas van cambiando poco a poco. Veo como no tiene ningún reparo en crear lazos igual de fuertes que el nuestro con otras personas, en que quizás no soy ya algo especial, en como esa promesa, nuestra promesa, única y especial, puede que la cumpla con otras personas.
No sé porqué mierda me siento así, no me lo preguntes, no sé porqué me molesta eso cuando no estás haciendo algo malo. Lo que realmente saco, es que me vas alejando de ti cada vez más sin darte cuenta. Y lo que verdaderamente me molesta, es que cuando estamos juntas, allí, en tu vida, me haces desaparecer. Primero vives, y luego me lo cuentas. Así siempre...hasta cuando estamos juntas. Eso es lo que me jode.
Yo sé que a mi se me nota todo, y que seguramente los días posteriores me pudo notar algo rara.. pero es que no puedo evitarlo. Cuando algo duele, escuece. Tal vez mi fallo esté en que no hablo con claridad, o en que no le hago saber exactamente los detalles que me han dolido... Un día voy a acabar mal por eso, lo sé. Pues puede que llegue el punto en el que estalle, en el que la cuerda se tense tanto que no pueda dar más de sí.
Cómo siempre, intento ver el lado positivo de las cosas. A veces lo consigo, y otras muchas no tanto. Pero bueno, lo importante es que los días que estuve andando hasta el faro, mojandome los pies y sientiendo el aire limpio en mis pulmones, pude reflexionar.
Creo que no es bueno aferrarse tanto a una sola persona, cerrarse, apostar todo por alguien. Creo que me tengo que valorar más. En este mundo nadie se muere por nadie. Por primera vez quiero sentirme segura de mí misma, ser quien soy con todo el mundo, recorrer la cortina que hay en mis ojos y conocer. Quiero no depender de nadie.
Por primer vez en mucho tiempo, en ese momento me sentí bien. Y me siento libre.
Crecer no solamente se refiere a la estatura, sino también a nuestra mente y curazón. Noto como lo hago constantemente, como voy cambiando.
Lo positivo de todo esto, es que me ha hecho darme cuenta que en nuestros extravíos encontramos los mejores hallazgos... porque es precioso perderse para volver a encontrarse.
Finalmente sólo me queda decir, que no debemos preocuparnos, las cosas a veces pasan, sólo pasan, queramos o no. Y aquí estaremos para afrontarlo todo.

¿y qué hago?

No sé qué hacer. No sé qué hacer con mi vida, con el presente, con el día a día. Con el paso de los minutos que me atormenta, con el paso del tiempo, con el transcurso de los años… y dime qué hago. Qué hago si no puedo sacarte de mi cabeza, qué hago si no puedo dejar de pensar en ti, qué hago si no puedo hacer como si no hubieras existido. Ahora lo pienso fríamente y solo tengo miedo, porque eso de que el tiempo lo cura todo puede que tenga excepción.  Que hago si allí donde miran mis ojos solo ven tu ausencia, que hago si eres el único que permanece, pase lo que pase… que puedo hacer si cuando algo acaba tú siempre vuelves, que hago si el nada no existe para mí, porque siempre estarás tú…

¿Qué pasaría si eres el único que puede ocupar mi corazón? ¿Y qué hago si esto no acabara nunca? Si nunca pudiese olvidarte… Que puedo hacer si no me quedan fuerzas ni fe para salir de este estado transitorio que me impide ser yo misma, que no me permite ser libre…  Dime qué puedo hacer para dormir este sentimiento para siempre…  Dime que hago con mis dudas, con mi inseguridad, con mi desesperación, con mis cambios de parecer… Que hago si la noche no es noche para mí, si solo es una película de tus besos con sabor a caramelo, del olor de tus manos, del brillo que desprendía tu mirada, de tu sonrisa, de tu mano entrelazada con la mía, de tus brazos rodeando mi cintura, de mi respiración acompañando la tuya…

Porque eres como un verano de San Juan en mitad del invierno… El brillo de las flores en primavera.

Y me pregunto, ¿por qué no adelantamos la película? Saltándonos estos capítulos de soledad y sufrimiento. Lleguemos al final donde somos felices… juntos.

Ahora, más que nunca, te echo de menos

Esta mañana colocando el desorden de mi cuarto, me he encontrado en el bolsillo del monedero el billete de Alsa que decía esto:  Córdoba hacia Granada, 22/07/2011.

Decidí guardarlo en mi cajita de corazón donde había olvidado que estaba el albúm que me regalaste por mi cumpleaños. Empezé a verlo detenidamente, a observar todos los detalles, los colores, las fotos. Al verlo se me encogió el corazón, por sólo pensar que en estas vacaciones de Navidad lo más probable sea que no nos veamos. Me gustaría saber como estás en este preciso momento. Saber porque no me has llamado con la respuesta de tus padres, porque no me has contestado al último estado que tienes en tuenti que era un poco raro, o por qué no me contestaste al mensaje de anoche, aunque sea un toque lo hubiese agradecido.

En fin, solo me hubiese gustado pasar tres o cuatro días contigo porque te he echado muchisímo de menos todo este tiempo, y te sigo echando cada día, no sé si tú tanto como yo. Aunque odie tu afán de quedar por encima, y tu otras muchas cosas de mí... Pero no sé, estas fechas son muy especiales y me gustaría compartir aunque sea una hora en tu compañia, en la compañía de mi pequeña. Porque siempre estaremos juntas, recuerdas? Como bien pusiste en el albúm, PASE LO QUE PASE.